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    Falsas creencias sobre la celulitis

    La celulitis a menudo se asocia con muchas creencias falsas que luchan por desaparecer del credo popular: para entender qué es verdad y qué no, primero debemos comenzar por aclarar qué es la celulitis, es decir, una enfermedad que afecta el tejido adiposo, el sistema circulatorio. y la piel, que puede afectar tanto a hombres como a mujeres.

    Sus causas pueden ser de carácter genético y hormonal-vascular, mientras que la mala alimentación y el sedentarismo excesivo son factores que no facilitan la situación.

    Pero, ¿cuáles son estas falsas creencias sobre la celulitis?

    • Beber mucho ayuda a eliminar la celulitis: esto es solo parcialmente cierto, porque obviamente beber mucha agua es útil para nuestro organismo, pero no es suficiente, ya que también debe ir asociado a un bajo consumo de sal, una alimentación correcta y un estilo de vida saludable lleno de actividad física.
    • Las cremas no son útiles: la acción combinada de masajes y cremas puede ayudar mucho, especialmente cuando se utilizan productos de alta calidad; sin embargo, al igual que con el punto anterior, todo debe estar siempre respaldado por una actividad motora regular y una nutrición adecuada.
    • El factor genético es una de las causas de la formación de la celulitis: la genética ciertamente contribuye pero ciertamente no es la única causa.

     

    Después de desmentir estos falsos mitos, podemos pasar a la acción: lo primero que hay que hacer para combatir la celulitis es entender la gravedad del problema y luego optar por el mejor tratamiento estético, o médico estético. De la mano de la tecnología médica y estética, también ha evolucionado la parte de análisis que, gracias a la termografía de contacto, ha permitido examinar y clasificar estos problemas de la mejor manera posible.

    El análisis termográfico de la celulitis, mediante el uso de placas especiales de cristal líquido microencapsulado, permite obtener una imagen en color de alta definición capaz de mostrar la situación de los tejidos subyacentes: de esta manera, es posible distinguir la grasa blanda de la grasa endurecida, así como poder clasificar la celulitis en uno de sus estadios (edematosa, fibrosa o esclerótica).

    Dada su altísima sensibilidad, también es posible moverse desde un punto de vista preventivo (limitando costes y tiempos de tratamiento) ya que el sistema es capaz de mostrar las primeras acumulaciones cuando aún no son visibles a simple vista ni palpables.

    La termografía de contacto es un análisis no invasivo, totalmente contraindicado, que cualquier persona puede realizar de forma fácil, rápida y cómoda: gracias a estas características, puede repetirse varias veces a lo largo del tiempo, con el fin de controlar el progreso real de cada tratamiento.

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