RICHIEDI INFORMAZIONI


     

    Eliminar la adiposidad localizada con la laserlipólisis

    La laserlipólisis es una técnica médico-estética muy eficaz para mejorar las zonas afectadas por depósitos de grasa localizada de tamaño pequeño o mediano, como el abdomen, las nalgas, las pantorrillas, los muslos y la parte interior de los brazos.

    Se basa en el uso de una luz láser que, aprovechando el efecto del calor, estimula la tonificación de la piel desde el interior. Es un procedimiento médico que debe realizarse en el quirófano después de una sedación ligera y anestesia local en la zona a tratar.

    Promete resultados similares a los de la liposucción pero sin el uso de un bisturí, por lo tanto con menos riesgos operativos y tiempos de recuperación inmediatos: no hay hospitalización y el paciente puede irse a casa poco después de terminar el tratamiento.

    La sonda láser se introduce en la grasa que se va a tratar y golpea directamente las células grasas, calentándolas hasta que revientan, liberando así su contenido de grasa que luego se eliminará a través del sistema linfático (por eso es aconsejable seguir una dieta purificadora baja en grasas en el período posterior al tratamiento para no sobrecargar el hígado y los riñones, que ya están ocupados eliminando los residuos producidos por el calentamiento con láser).

    Es posible volver al trabajo a partir del día siguiente, pero hay que llevar una funda durante al menos 3 semanas.

    Por lo general, no hay efectos secundarios importantes, pero es posible experimentar hinchazones modestas o pequeños hematomas que se resuelven en pocos días. El tratamiento no está indicado en caso de embarazo, lactancia, tratamiento con anticoagulantes o pacientes con enfermedades degenerativas.

    Antes de someterse a la laserlipólisis, siempre recomendamos un análisis de la adiposidad que le permitirá conocer la composición real de los tejidos subyacentes, identificando la presencia de tejido adiposo incluso en zonas donde no es visible a simple vista o detectable por palpación.

    El análisis de la adiposidad se lleva a cabo mediante la termografía de contacto, una tecnología especial basada en el uso de placas termográficas de cristal líquido que, una vez colocadas en la zona a analizar, reflejan la composición de los tejidos subyacentes permitiendo la identificación y clasificación de las zonas adiposas: un examen fácil e indoloro que, si se desea, puede repetirse incluso después del tratamiento para ver los progresos reales.

    El análisis termográfico es un examen al que puede someterse cualquier persona, dada su total ausencia de contraindicaciones, y está disponible en los mejores centros de belleza y de medicina estética, así como en los mejores estudios nutricionales y en algunas farmacias seleccionadas.

     

    No Comments

    Post A Comment