11 Nov Pilates: ¿puede ayudar en la lucha contra la celulitis y la adiposidad localizada?

La celulitis es un trastorno multifactorial muy extendido en la mujer, con causas que van desde la genética hasta las hormonas, pasando por la mala nutrición y el sedentarismo: condiciones ideales para la aparición de la retención de agua y, posteriormente, de la celulitis y la adiposidad localizadas en diversas zonas del cuerpo.

Hemos visto varios métodos de enfoque, tanto a nivel estético como médico-estético y cosmético, pero todos, para asegurar el mejor resultado posible, requieren ser combinados con un estilo de vida saludable y una actividad física regular.

El ejercicio, de hecho, reactiva la circulación y permite la eliminación del exceso de líquidos.

El pilates es una disciplina suave pero, al mismo tiempo, exigente e intensa si se hace con criterio.

Es una actividad anaeróbica, realizada sin pesas, que ayuda a combatir la retención de agua al favorecer el drenaje de líquidos, la eliminación de residuos y toxinas y el restablecimiento de una correcta circulación sanguínea.

Los ejercicios permiten desarrollar la musculatura, alargándola y armonizando entre sí las diferentes bandas musculares.

A través de posiciones, ejercicios y movimientos específicos, el pilates ayuda a mejorar significativamente la apariencia de la celulitis, pero no sólo: también es un valioso entrenamiento para prevenirla.

La celulitis es una enfermedad inflamatoria, por lo que no todas las actividades físicas están indicadas: por ejemplo, todas aquellas que requieren esfuerzos cortos e intensos deben evitarse, especialmente cuando nos enfrentamos a una condición de celulitis avanzada.

Dado que se trata de un camino real (y no de una sola sesión), le recomendamos que acuda a un gimnasio, o a un entrenador personal especializado, que disponga de una tecnología como la termografía en contacto para poder monitorizar, a lo largo del tiempo, el progreso real resultante de los pilates.

La termografía de contacto se basa en la utilización de placas de cristal líquido microencapsuladas capaces de detectar cualquier ligera variación de la piel con la que entran en contacto, resaltando, mediante variación cromática, la situación de los tejidos subyacentes.

De esta manera será posible determinar el estadio de la celulitis (ausente, edematosa, fibrosa, esclerótica) incluso cuando aún no sea visible a simple vista o detectable a la palpación.

Es un examen rápido, contraindicado y repetible: se puede realizar varias veces para comprobar la evolución de la celulitis y la eficacia de las sesiones de pilates realizadas.