28 Ott Endermología y celulitis: ¿cómo funciona el tratamiento?

La endermología es una técnica de medicina estética no invasiva y no quirúrgica, dirigida a reducir la celulitis y los depósitos de grasa localizados.

Se basa en el uso de una máquina que realiza un masaje mecánico, utilizando rodillos, que se hacen deslizar sobre las áreas a tratar, provocando la redistribución de adiposidades y la remodelación de la superficie de la piel.

La endermología es un tratamiento que no implica el uso de agujas o escalpelos y permite dar suavidad y flexibilidad a la piel, reduciendo sus estrías.

El tratamiento se realiza de forma ambulatoria y, mientras el paciente está acostado boca arriba, el masaje se realiza en las áreas a tratar.

La característica es el traje técnico, hecho para usar antes de cada sesión, que permite un mejor agarre del tejido durante el tratamiento.

A menudo se usa después de los tratamientos de liposucción, pero también se puede recomendar sin otros tratamientos o en combinación con dieta y actividad física.

Es posible intervenir en áreas donde se acumula más grasa, como piernas (celulitis), pantorrillas, abdomen y brazos (adiposidad localizada) y cada sesión tiene una duración que varía de 25 a 35 minutos.

Dado que este es un tratamiento que requiere un número bastante alto de sesiones (aproximadamente 10-15), realizadas una o dos veces por semana, es bueno contar con un centro de belleza con tecnología capaz de monitorear el progreso de las sesiones y las más mínimas variaciones. de la condición de la celulitis, sesión tras sesión (para asegurarse de que el tratamiento está dando los beneficios reales prometidos): termografía de contacto.

Basado en el uso de placas de cristal líquido, la termografía de contacto (sistema IPS protegido por patente internacional) permite detectar (simplemente colocando las placas termográficas en las áreas tratadas por endermología) la temperatura de la piel que refleja lo que sucede en los tejidos subyacentes que resaltan , a través de imágenes en color de alta resolución, la presencia y el grado de celulitis y el tipo de grasa visceral.

Un examen que no es invasivo, fácil, indoloro y sin efectos secundarios que, precisamente por estas características, es posible repetir periódicamente para mantener el progreso del tratamiento bajo control.

Por otro lado, la endermología está contraindicada en pacientes con:

• neoplasias, tanto actuales como pasadas (es necesario que hayan transcurrido al menos 5 años desde la recuperación y que su propio médico le administre la nulla osta),
• flebitis,
• terapias anticoagulantes en progreso,
• angioma,
• enfermedades cardiovasculares importantes,
• estado de embarazo o lactancia,
• obesidad.

Después de los tratamientos endermológicos, es posible encontrar algunos efectos secundarios, como enrojecimiento del área tratada o, en casos más limitados, algunos hematomas pequeños.