09 Dic Electroporación y celulitis: ¿cómo funciona este tratamiento?
Una de las razones por las que se concreta con más frecuencia una cita en nuestro centro médico-estético de confianza es la celulitis, un trastorno multifactorial caracterizado por una molesta mancha de piel de naranja que, si se descuida, empeora cada vez más hasta que se arraiga y duele.
Sin embargo, hay una larga serie de medidas a implementar tanto desde una perspectiva preventiva como reparadora, como por ejemplo, los tratamientos estéticos y médico-estéticos que, dependiendo de la condición inicial, pueden hacer que logremos excelentes resultados.
¿Por qué estamos hablando de una condición inicial? Porque es muy importante realizar un análisis que pueda identificar correctamente el estado de los tejidos subyacentes para que el profesional pueda recomendar el mejor tratamiento en función de nuestra situación.
Para realizar un correcto análisis de la celulitis es imprescindible acudir a un centro equipado con termografía de contacto, sistema patentado basado en el uso de placas de cristal líquido de alta resolución.
¿Como funciona? Es muy sencillo: basta con aplicar la placa sobre la zona a analizar y, en unos segundos, obtendrás una imagen en color que muestra el estado de los tejidos: de esta forma, será posible clasificar la celulitis en una de sus tres estadios (edematoso, fibroso y esclerótico).
Estamos hablando de un examen totalmente libre de contraindicaciones, indoloro y repetible, apto para cualquier persona.
Una vez evaluada la condición de partida, podemos someternos a un tratamiento de electroporación cuyo principio de funcionamiento es muy sencillo porque aprovecha el uso de impulsos eléctricos que dilatan los poros de la piel permitiendo el paso directo de las sustancias elegidas por el médico hacia las capas. más profundo que la dermis.
Hablamos de un excelente tratamiento para la celulitis pero que también se puede aplicar sobre los depósitos de grasa localizados, la piel flácida y las estrías. Los efectos secundarios son modestos y transitorios y pueden estar representados por enrojecimiento o leve eritema en las áreas tratadas. No es un tratamiento adecuado para todas las personas, debe ser evitado por personas con enfermedades cardíacas o marcapasos y por mujeres embarazadas.
En cualquier caso, siempre se requiere una visita previa al médico estético.
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